Objetivos del curso
El modelo cognitivo-conductual constituye un movimiento psicoterapéutico contemporáneo, posee lineamientos éticos, bases filosóficas y metodológicas científicas, que la contextualiza como el abordaje más formal y estructurado en las ciencias del comportamiento.
La terapia cognitivo-conductual considera que los patrones de conducta desadaptada pueden ser consecuencia de patrones de pensamiento irracional. Por lo que involucra todos los procedimientos que toman en cuenta variables ambientales, sentimientos y conductas, donde los eventos, son manipulados en un intento por alterar tanto conductas como condiciones.
Por lo que la evaluación conductual y cognitiva implican un procedimiento terapéutico indisoluble del procedimiento terapéutico. Donde la evaluación es un procedimiento que lleva un orden y que se compone de fases que llevan a concebir, dentro de la aproximación cognitivo-conductual, una lógica general que pondera las interacciones ambiente-cognición-conducta, como fuente primaria de explicación de los problemas psicológicos y como núcleo de la aplicación de diversas técnicas de intervención.
Las intervenciones cognitivo-conductual han incidido en aspectos como la desesperanza aprendida, depresión, ansiedad, trastornos de personalidad, entre otros trastornos psicológicos.
Teniendo como resultado la disminución del estrés psicológico provocado por el dolor emocional. Por lo que es una de las estrategias de intervención más empleadas en la actualidad en el mejoramiento de la calidad de vida.