Analisis de educaedu
Seminario: Cómo crear una cultura de Cero Tolerancia al Fraude en su organización
Caer víctima de un esquema fraudulento puede significar perder desde algunos cientos de pesos hasta la quiebra de su empresa. Si bien la mayoría de las personas consideran un mito el evento de fraude, la realidad es que el mismo se encuentra en su organización en este preciso momento.
Robo de información, espionaje industrial, casos donde las compañías quedan envueltas en lavado de dinero superan los procedimientos habituales de control. El defraudador va un paso por delante, invierte más tiempo a idear la maniobra que la empresa a evitarla y obvio, ello siempre termina beneficiando al amante del fraude.
El fraude es un delito; tiene un costo muy alto para las compañías y para su reputación. Sin embargo, las empresas aún no llegan a prevenir los fraudes y a veces resulta tarde para detectarlos, no se preparan debidamente para ello.
Los fraudes pueden cometerse de muchas formas, desde el simple robo de un lápiz, hasta la implementación de un sistema de contabilidad creativa. Muchas veces consideramos que el fraude solo se relaciona con el robo o desvío de efectivo, y que son los mandos medios quienes ejecutan estas acciones, esto en parte es un mito, ya que las estadísticas muestran que los fraudes más cuantiosos son los denominados de “cuello blanco”, es decir los que se cometen en las esferas más altas de la organización; donde la dirección muestra un “tono bajo”, es decir un falta de interés en los controles, donde también, se carece de un buen gobierno corporativo. Vale mencionar uno de los fraudes más sonados de esta década; el caso de Enron, una estafa orquestada por altos ejecutivos acabó con la quiebra de la compañía, millonarias pérdidas para los accionistas y miles de empleados en la calle.
No permita que esto suceda en su organización, es el momento de implantar una cultura de “cero tolerancia al fraude”, aplicando las estrategias que hoy en día aplican las “empresas de excelencia”.