Concibe la acción del director como un quehacer de naturaleza política, como un arte que pretende hacer las cosas justas y eficaces en la empresa y en su entorno y busca elaborar escenarios de futuro que, fundados en la realidad política y social cotidiana, llevan a los empresarios a lograr un sano equilibrio en las influencias mutuas que se dan entre entorno y empresa. En esta área se analiza el sentido y la justificación social de la empresa, definiendo sus derechos, obligaciones y fines.