Instituto Tecnológico de la Costa Grande

El Instituto Tecnológico de la Costa Grande inició sus actividades con 23 alumnos inscritos en Ingeniería en Acuicultura y 114 en Licenciatura en Informática. Es importante mencionar que estando autorizada la apertura de Ingeniería en Bioquímica, ésta no se impartió por falta de demanda. 

El 7 de febrero de 1989 se inaugura el primer edificio propio del Instituto en un terreno de 3.5 hectáreas. El día 30 de noviembre de 2007, se recibe el decreto de donación de terreno por parte del Lic. Silvano Blanco Deaquino, Presidente Constitucional del Municipio de Zihuatanejo de Azueta.

En agosto de 1991 se ofrece la Licenciatura en Administración de Empresas con 40 Alumnos, en agosto de 1992 inician la Licenciatura en Contaduría y la Ingeniería Electromecánica con 71 y 22 alumnos respectivamente.

En 1993, producto de la reforma educativa, se reestructuran las carreras y por consecuencia en los planes y programas de estudio se incluyen las residencias profesionales y se definen los módulos de especialidad para cada carrera, elaborándose en las academias un total de 44 programas. Como consecuencia lógica de esta reforma, se pone en liquidación la carrera de Licenciatura en Administración de Empresas quedando en su lugar la Licenciatura en Administración.

En el ciclo escolar 1996 – 1997 egresa el último Ingeniero en Acuicultura y se pone en liquidación esa carrera por falta de demanda.

En agosto de 1996 se inicia la oferta de la carrera de Ingeniería en Sistemas Computacionales inscribiendo un total de 55 alumnos.

En 2004, con la implantación del Nuevo Modelo Educativo del Siglo XXI, los programas educativos de todas las carreras sufren significativas reformas y en consecuencia los planes y programas de estudio implementados en 1993, entran en liquidación.

En agosto de 2006 y después de haber sido autorizado el estudio de factibilidad e impacto en la región, se ofrece la carrera de Arquitectura con un ingreso de 45 estudiantes. Esta nueva opción en los programas ofertados crea una gran expectación en la región que se traduce en una respuesta inmediata por parte de los aspirantes que demandan estudiar este programa.

Arquitectura, se autoriza el estudio de factibilidad del programa así como la carrera de Ingeniería Ambiental, misma que no se ofrece por falta de recursos humanos.